El fin de semana estuvo muy padre. No tenía muchas expectativas y al final de cuentas todo resulto divertido.

Nos invitaron a un campamento del día del niño (algo atrasado) y de la diversidad biológica, a cargo de la dirección gral. Forestal y sustentabilidad y que la neta se la rifaron super bien, desde que llegamos nos recibieron super amables, nos regalaron a cada quien una camisa, hasta eso chidilla y te decían que también tenían casas de campaña por si no traías la tuya, todo super organizado. Despúes fuimos a unas conferencias acerca de los insectos, los murciélagos, y primeros auxilios y todo bien en serio ya que los de protección civil nos enseñaron como hacer férulas, camillas, etc. Provisionales en caso de una factura o algo así para saber como improvisar en pleno bosque. La neta parece algo ñoño, pero en verdad que eso no esta de más saberlo y aparte la manera en que te contaban todos esos temas,no era como en la escuela, asi de aburrido, sino era mas concreto y sencillo. Despúes nos dieron de cenar (gratis!!!!)para después ir a una obra de teatro, con títeres a cargo de una compañía llamada la cucaracha, que estuvieron geniales, no solamente eran títeres viejitos sino tenían efectos con luz negra y aparte tocaban canciones que ellos mismos compusieron, con onda rockera y pues con el mensaje siempre positivo para los niños y me reí y divertí muchísimo. Luego siguió el recorrido nocturno, con nuestras linternas y todo, bien padre, nos fuimos por senderos guiados por los forestales (onda guardabosques) que te explicaban acerca de la vegetacion del lugar, de los animales e insectos que ahí se encontraban y de sus nuevas eco-tecnologías para cuidar el agua, como unos depósitos en donde el agua pluvial se almacenaba ahí con una membrana que los cubría para mantenerla en buen estado por un tiempo. Yo super encantada con eso de las eco-tecnologías que la neta si yo diseñara mi casa lo haría tomando en cuenta todo un sistema sustentable, pro-medio ambiente.

Después de una buen rato de dar el rol, llegamos a una cuevita en donde nos advirtieron que había murciélagos pero que ellos seguirían tranquilos si nosotros pasábamos en silencio y que con las linternas apuntaramos solo al suelo para no asustarlos, pase toda nerviosa y emocionada aunque solo vimos manchas oscuras donde se notaba que estaban todos acurrucados los murciélaguitos.

Al final de la noche estuvimos en una lunada, en un área especial para fogatas y después de asar salchichas y bombones, me quisé ir a dormir, aunque ilusamente porque como a la media hra. empezó a tocar uno de los meros jefes de ahí, con su guitarra canciones de josé josé, de Serrat y muchas más que no conocía pero que me impresiono muchísimo la manera tan peculiar que demostró tener el sr. Para canatar y tocar, fácil 50 canciones sin repetir ni una, hasta una que se llama, el tango del perro algo así, curísima, y después de varios intentos de dormir, me hice a la idea que me dormiría cuando el quisiera dejar de tocar y eso fue hasta las 6 de la mañana cuando cantó el gallo.

Al otro día nos marchamos, muy desvelados pero muy contentos y satisfechos con el paseo y me dio gusto haber pasado un fin de semana diferente a los demás, fuera delo habitual y del bullicio sobre todo.