Uno de mis lugares favoritos
Me propuse ir a caminar por lo menos 3 veces por semana, camino rápido según yo para que si sea como ejercicio y no como paseo, pero descubrí que son las dos cosas, me ejercito y a la vez tengo un hermoso paisaje:
Cuando voy caminando mi mente piensa tantas cosas pero a la vez mi cuerpo se relja, respiro profundo el aire fresco que dan los pinos y demás árboles, y a mi lado está el atardecer como un perfecto relajante, dandome la mejor vista y reafirmando mi idea de pasar las tardes en ese parque viendo uno de los cientos de atardeceres que he visto ahí, haciendo brillar cada flor, cada árbol pequeño o grande con discretos rayos que se filtran entre las hojas con un dulce tono amarillo y naranja y haciendo ver el pasto aún más verde. Ahora que ha llovido algo, pues muchas partes estan todas verdes, y me encanta ver el parque con ese aspecto. Me gusta pensar que ese es su vista habitual aunque no sea así, porque las demás épocas del año no favorecen tanto a su fertilidad como en verano, pero a mi me gusta guardar esa foto en mi mente del metropolitano, verde verde, en ese pasto donde he pasado tantos momentos, desde mi adolescencia, hasta ahora que soy mamá y que llevo a mis hijos ahí, a disfrutar de mágicas tardes, de escuchar algunas risas, como si fueran la mejor música del mundo, las risas de los niños que felices pasean por ahí, mientras veo como te columpias, sonríes y tus ojos se iluminan, mientras mi corazón se hace más grande ante esos momentos mágicos frente a ti.
0 comments:
Post a Comment